Nvidia ha pasado de ser un fabricante de tarjetas gráficas a convertirse en la columna vertebral de la revolución de la inteligencia artificial, situándose entre las empresas más valiosas del mundo con una capitalización bursátil superior a los 3 billones de dólares en mayo de 2025.
El ascenso meteórico de la compañía ha estado impulsado por una demanda sin precedentes de sus unidades de procesamiento gráfico (GPUs), esenciales para desarrollar y ejecutar modelos de IA. Su cotización ha aumentado un 845% desde enero de 2023, impulsada por la enorme demanda de sus GPUs. Tras superar el billón de dólares en capitalización a mediados de 2023, el valor de Nvidia alcanzó los 2 billones en febrero de 2024 y llegó a los 3 billones apenas tres meses después, en junio de 2024. En noviembre de 2024, Nvidia se convirtió en la mayor empresa cotizada de EE. UU. por capitalización bursátil, superando a Apple con un valor superior a los 3,6 billones de dólares.
La administración Trump ha realizado recientemente cambios significativos en la política de IA de EE. UU. que afectan directamente a Nvidia. A principios de mayo de 2025, el gobierno eliminó las restricciones estadounidenses a la exportación de chips, conocidas como la "norma de difusión de IA", deteniendo de facto la entrada en vigor de un conjunto de límites a los semiconductores de inteligencia artificial. Las acciones de Nvidia subieron tras conocerse la noticia, ya que la empresa había manifestado que restringir la exportación de chips limita el liderazgo estadounidense en tecnología avanzada. "Agradecemos el liderazgo y la nueva dirección de la Administración en materia de política de IA", declaró un portavoz de Nvidia.
Sin embargo, la relación entre Nvidia y la administración sigue siendo compleja. Aunque el presidente Donald Trump ha expresado su deseo de que EE. UU. siga siendo líder en IA, su administración ha anunciado recientemente una nueva ronda de restricciones a la exportación de chips de IA dirigidas a China. El Departamento de Comercio advirtió contra el uso de chips de IA estadounidenses en modelos chinos y señaló las "tácticas de desvío" en las cadenas de suministro. Estas nuevas restricciones a la exportación se produjeron pocos días después de que EE. UU. y China acordaran pausar la mayoría de los aranceles mutuos.
Más allá de las políticas de exportación, las reformas fiscales propuestas por Trump podrían beneficiar significativamente a Nvidia. El presidente Trump ha propuesto reducir el impuesto federal de sociedades al 15%. Aunque una bajada del impuesto de sociedades no siempre ha supuesto un auge para el conjunto del mercado bursátil, sí podría marcar la diferencia para empresas individuales al aumentar sus márgenes de beneficio. A su vez, el capital excedente podría devolverse a los accionistas mediante recompras de acciones y dividendos. Cabe destacar que Nvidia recompró acciones por valor de unos 26.000 millones de dólares durante los 12 meses que finalizaron en junio de 2024.
A pesar de los posibles obstáculos, la ventaja tecnológica de Nvidia sigue siendo formidable. La GPU H100 para centros de datos de la compañía dominó el sector en 2023 y la mayor parte de 2024, basada en la arquitectura Hopper, que ha sido superada por Blackwell y, más recientemente, por Blackwell Ultra. La próxima GPU Blackwell Ultra GB300 puede ofrecer hasta 50 veces más rendimiento que la H100 en determinadas configuraciones, ya que ha sido diseñada para modelos de IA de nueva generación capaces de "razonar". Esta continua innovación sitúa a Nvidia en una posición privilegiada para mantener su liderazgo en el mercado de chips de IA en el futuro previsible.