La administración Trump ha cancelado oficialmente un conjunto de restricciones a la exportación de chips de IA avanzados impuestas durante la era Biden, lo que supone un cambio significativo en la política comercial tecnológica de Estados Unidos apenas unos días antes de que las regulaciones entrasen en vigor.
El Marco para la Difusión de la Inteligencia Artificial, emitido durante la última semana de la presidencia de Biden en enero, habría dividido el mundo en tres niveles distintos. El primer nivel, que incluía a 17 países y Taiwán, habría recibido acceso ilimitado a los chips de IA más avanzados. Un segundo nivel, compuesto por aproximadamente 120 naciones, habría estado sujeto a límites en la cantidad de chips, mientras que países como China, Rusia, Irán y Corea del Norte habrían quedado completamente bloqueados en el acceso a estos semiconductores avanzados.
"La norma de IA de Biden es excesivamente compleja, excesivamente burocrática y frenaría la innovación estadounidense", declaró un portavoz del Departamento de Comercio. Los funcionarios criticaron especialmente el sistema por niveles, calificándolo de "inaplicable". La administración está trabajando ahora en un marco de reemplazo, aunque no se ha anunciado ningún calendario concreto.
La decisión supone una victoria para fabricantes de chips como Nvidia y AMD, cuyos directivos se han manifestado abiertamente en contra de las restricciones a la exportación. El CEO de Nvidia, Jensen Huang, advirtió recientemente que quedar fuera del mercado chino de IA sería una "pérdida enorme", estimando que podría alcanzar los 50.000 millones de dólares en los próximos años. Las acciones de Nvidia subieron un 3% tras el anuncio.
Los críticos del enfoque de Biden, entre ellos Microsoft, argumentaban que el sistema por niveles empujaría a los países de segundo nivel a buscar tecnología de IA en otros lugares, posiblemente en China. El senador Ted Cruz (republicano por Texas) elogió la decisión de Trump y anunció planes para presentar una legislación que cree un "sandbox regulatorio de IA" inspirado en el enfoque adoptado durante los primeros años de Internet.
Aunque la administración Trump ha eliminado el sistema por niveles, ha mantenido algunas restricciones al acceso de China a tecnología avanzada de IA. El mes pasado, exigió a Nvidia obtener licencias especiales para vender sus chips H20 a clientes chinos, lo que supuso un cargo de 5.500 millones de dólares para la compañía. Los analistas sugieren que la administración podría estar posicionando los chips estadounidenses como una poderosa herramienta de negociación en las actuales conversaciones comerciales con varias naciones.