Meta Platforms está realizando un compromiso sin precedentes con la inteligencia artificial, con el anuncio de su CEO, Mark Zuckerberg, de invertir entre 60.000 y 65.000 millones de dólares en infraestructura de IA durante 2025.
La inversión representa un aumento significativo respecto al gasto estimado de Meta para 2024, que se sitúa entre 38.000 y 40.000 millones de dólares, y supera las expectativas de los analistas, que preveían 50.250 millones para el año. Zuckerberg ha declarado que 2025 será "un año decisivo para la IA" mientras la compañía se posiciona frente a competidores como OpenAI y Google.
Uno de los pilares de esta inversión es la construcción de un gigantesco centro de datos de IA en Richland Parish, Luisiana. La instalación, valorada en 10.000 millones de dólares y con una superficie de 370.000 metros cuadrados en un terreno de 910 hectáreas, será el mayor centro de datos de Meta a nivel mundial. Se prevé que esté terminado en 2030 y respaldará las ambiciosas iniciativas de IA de Meta, especialmente el desarrollo de sus modelos de lenguaje Llama. El centro de Luisiana generará aproximadamente 500 empleos directos en la región y se estima que más de 1.000 puestos de trabajo indirectos.
La inversión de Meta incluye planes para finalizar 2025 con más de 1,3 millones de unidades de procesamiento gráfico (GPU) y poner en línea alrededor de 1 gigavatio de potencia de computación. La compañía está construyendo un centro de datos tan grande que, según Zuckerberg, "cubriría una parte significativa de Manhattan".
La inversión respaldará el asistente de IA de Meta, que Zuckerberg espera que atienda a más de 1.000 millones de personas en 2025, frente a los aproximadamente 600 millones de usuarios activos mensuales del año pasado. También impulsará el desarrollo de Llama 4, el modelo de IA de nueva generación de Meta que se lanzará en abril de 2025 y que contará con capacidades multimodales para procesar texto, imágenes y vídeo.
Esta enorme inversión en IA subraya el giro estratégico de Meta hacia la inteligencia artificial, sin descuidar su negocio principal de redes sociales. La compañía afronta la presión de demostrar resultados con estas inversiones, y Zuckerberg reconoce que se trata de un "ciclo de inversión a varios años" antes de que los productos de IA de Meta se conviertan en servicios rentables.