Google DeepMind ha logrado un avance importante en la inteligencia artificial médica con la mejora de su sistema Articulate Medical Intelligence Explorer (AMIE), que ahora puede analizar datos médicos visuales junto a conversaciones basadas en texto.
La versión actualizada de AMIE, impulsada por el modelo Gemini 2.0 Flash de Google, es capaz de interpretar diversas imágenes médicas, incluidas fotografías dermatológicas, electrocardiogramas y documentos de laboratorio durante consultas en tiempo real. Esta capacidad multimodal permite a la IA solicitar imágenes a mitad de la conversación, analizarlas e incorporar los hallazgos a su proceso diagnóstico.
En una evaluación exhaustiva que incluyó 105 consultas simuladas, AMIE demostró un rendimiento superior al de médicos de atención primaria titulados. Especialistas médicos que revisaron las consultas valoraron a AMIE por encima de los médicos en varios aspectos clave, como la calidad de la interpretación de imágenes, la precisión diagnóstica y el desarrollo de planes de tratamiento.
"El estado interno de AMIE recoge su conocimiento sobre el paciente en un momento dado de la conversación", explicaron los investigadores de Google DeepMind en su anuncio de mayo de 2025. Esto permite al sistema guiar sus preguntas y respuestas como lo haría un clínico experimentado recopilando evidencias.
Los actores que interpretaron a pacientes en el estudio calificaron con frecuencia las interacciones con AMIE como superiores a las mantenidas con médicos humanos, destacando uno de ellos que la explicación de una afección cutánea por parte de AMIE fue más clara que la recibida en una reciente consulta de telemedicina.
Este avance coincide con el informe AI Index 2025 de la Universidad de Stanford, que destaca un progreso sin precedentes en las aplicaciones de IA en sanidad. El informe señala que el número de dispositivos médicos con IA aprobados por la FDA ha pasado de solo seis en 2015 a 223 en 2023.
Aunque las capacidades de AMIE son impresionantes, Google recalca que el sistema sigue siendo experimental. Ahora comienza la fase de pruebas en el mundo real a través de una colaboración de investigación con el Beth Israel Deaconess Medical Center, donde AMIE será evaluado en entornos clínicos reales con el consentimiento de los pacientes.
"La integración de percepción y razonamiento multimodal supone un avance útil para las capacidades de la IA conversacional en medicina", afirmaron los investigadores de Google. "Al permitir que AMIE 'vea' e interprete los tipos de evidencias visuales cruciales en la práctica clínica, esta investigación demuestra las capacidades de IA necesarias para asistir de manera más eficaz a pacientes y profesionales en la prestación de una atención de alta calidad."