En un cambio significativo respecto a su enfoque históricamente cerrado, Nvidia ha presentado NVLink Fusion, una nueva tecnología que abre su infraestructura de IA a procesadores de terceros, manteniendo a la compañía en el centro del desarrollo de inteligencia artificial.
Anunciado por el CEO Jensen Huang durante su conferencia magistral en Computex 2025 en Taipéi el 19 de mayo, NVLink Fusion permite la creación de infraestructuras de IA semi-personalizadas al permitir que los clientes combinen procesadores de Nvidia con diferentes CPUs y circuitos integrados de aplicación específica (ASICs).
"NVLink Fusion es para que puedas construir infraestructura de IA semi-personalizada, no solo chips semi-personalizados", explicó Huang durante su presentación. La tecnología ofrece a los usuarios los beneficios de la infraestructura y el ecosistema NVLink de Nvidia, sin importar con qué procesadores combinen las GPUs de Nvidia.
Nvidia ya ha asegurado la colaboración de varios socios importantes en la fabricación de chips para NVLink Fusion, incluyendo MediaTek, Marvell, Alchip, Astera Labs, Synopsys y Cadence. Además, empresas como Fujitsu y Qualcomm Technologies podrán conectar sus propios CPUs de terceros con GPUs de Nvidia en centros de datos de IA.
Los analistas consideran este movimiento como estratégicamente relevante. Ray Wang, analista de semiconductores, señaló que "NVLink Fusion consolida a Nvidia como el centro de las fábricas de IA de próxima generación, incluso cuando esos sistemas no están construidos completamente con chips de Nvidia". Si bien el programa podría reducir la demanda de CPUs propias de Nvidia, la flexibilidad añadida mejora la competitividad de las soluciones basadas en GPUs de Nvidia frente a arquitecturas alternativas.
Cabe destacar la ausencia de los principales competidores de Nvidia—Broadcom, AMD e Intel—en el ecosistema NVLink Fusion, ya que son miembros del consorcio rival Ultra Accelerator Link (UALink), que busca crear un estándar abierto de interconexión para la industria.
El anuncio llega en un momento en que grandes proveedores de la nube como Google, Microsoft y Amazon desarrollan sus propios procesadores personalizados, lo que podría amenazar el dominio de Nvidia. Al adoptar la interoperabilidad y mantener el control sobre la tecnología crítica de interconexión, Nvidia busca consolidar su posición como la base esencial para el despliegue de IA en un entorno cada vez más competitivo.