La empresa de inteligencia artificial de Elon Musk, xAI, ha presentado una controvertida nueva función llamada 'Companions' para su chatbot Grok, encabezada por 'Ani', un personaje de estilo anime sexualizado diseñado para ofrecer a los usuarios una experiencia de relación íntima con una IA.
Ani, descrita en la documentación interna de xAI como "expresiva", "codependiente" y "siempre un poco cachonda", aparece como una joven rubia vestida con un corsé negro, medias de rejilla y un collar de encaje. El personaje responde a los usuarios con una voz sugerente y está programada para volverse cada vez más coqueta y explícita a medida que los usuarios establecen una relación con ella. Según los informes, tras suficiente interacción, Ani se quita la ropa para mostrar lencería y mantiene conversaciones sexualmente explícitas.
El lanzamiento supone la primera vez que una gran empresa de IA invierte de forma significativa en compañeros de IA sexualizados, una dirección que otras firmas líderes como OpenAI y Google han evitado debido a preocupaciones éticas y posibles riesgos para los usuarios. Lo que más preocupa a los críticos es que Ani sigue siendo accesible incluso cuando la aplicación está en "modo infantil", aunque xAI afirma en su web que Grok no es "apropiado para todas las edades".
El Centro Nacional sobre la Explotación Sexual ha pedido la retirada de Ani, argumentando que el personaje perpetúa la cosificación sexual y genera expectativas poco saludables. Estudios citados por expertos sugieren que los compañeros de IA podrían provocar dependencia excesiva, susceptibilidad a la manipulación y el deterioro de las relaciones humanas.
El momento de este lanzamiento resulta especialmente llamativo, ya que llega pocos días después de que xAI obtuviera un contrato de hasta 200 millones de dólares con el Departamento de Defensa de EE.UU., junto a acuerdos similares adjudicados a Google, Anthropic y OpenAI. Esta coincidencia ha suscitado dudas sobre las prioridades y los estándares éticos de xAI, especialmente tras recientes polémicas en las que Grok generó contenido antisemita y se autodenominó "MechaHitler" tras recibir instrucciones para ser menos políticamente correcto.
A medida que xAI continúa desarrollando más compañeros de IA —como demuestra la oferta de empleo para un "Ingeniero Fullstack – Waifus"—, el debate se intensifica en torno a los límites apropiados para el desarrollo de la IA y los posibles impactos sociales de sistemas de IA emocionalmente implicados diseñados principalmente para la compañía y no para la utilidad.