La ambiciosa inversión de 14.300 millones de dólares de Meta en Scale AI representa uno de los acuerdos más significativos del sector tecnológico en materia de inteligencia artificial en 2025, valorando la startup de etiquetado de datos en aproximadamente 29.000 millones de dólares. El acuerdo, cerrado en junio, otorga a Meta una participación no votante del 49% en Scale AI y suma al fundador y CEO de la empresa, Alexandr Wang, a las filas de Meta para liderar la nueva iniciativa de 'Superinteligencia', que reportará directamente a Mark Zuckerberg.
Wang, que se convirtió en el multimillonario hecho a sí mismo más joven del mundo a los 24 años tras fundar Scale AI en 2016, dejará su puesto de CEO aunque permanecerá en el consejo de administración de Scale. Jason Droege, hasta ahora director de estrategia de Scale y con experiencia ejecutiva previa en Uber Eats y Axon, asumirá el cargo de CEO interino de la empresa, que continuará operando de forma independiente.
El acuerdo llega en un momento crítico para Meta, que ha tenido dificultades para seguir el ritmo de sus competidores en la carrera de la IA a pesar de sus enormes inversiones. Zuckerberg se ha mostrado cada vez más frustrado con la posición de Meta en el ámbito de la IA, especialmente tras la tibia acogida de sus modelos Llama 4 lanzados en abril de 2025. La compañía aún no ha lanzado su modelo más potente, 'Behemoth', debido a dudas sobre sus capacidades en comparación con las ofertas de OpenAI y la china DeepSeek.
La inversión ya ha provocado importantes repercusiones en la industria. Grandes clientes de Scale AI, como Google (supuestamente el mayor cliente de Scale) y OpenAI, han comenzado a reducir sus relaciones con la empresa. Estos líderes de la IA temen que la importante participación de Meta pueda exponer sus prioridades de investigación y planos técnicos a un competidor directo. Aunque Scale AI ha asegurado que Meta no tendrá acceso a los datos de clientes ni a información empresarial, el posible conflicto de intereses ha abierto oportunidades inmediatas para competidores más pequeños e independientes en el sector del etiquetado de datos.
Para Meta, la adquisición del conocimiento de Wang y las capacidades de datos de Scale supone un intento estratégico de acelerar sus ambiciones en AGI. La compañía ha estado reorganizando sus esfuerzos en IA a lo largo de 2025, desplazando el foco desde su unidad de Investigación Fundamental de Inteligencia Artificial (FAIR) hacia equipos más orientados al producto. La nueva unidad de 'Superinteligencia' de Wang tiene como objetivo desarrollar sistemas de IA capaces de igualar o superar el rendimiento humano en múltiples dominios, el gran objetivo en la actual carrera de la IA.
El acuerdo pone de manifiesto cómo la competencia en IA está evolucionando de una batalla por los algoritmos a una guerra por los datos y el talento. Al asegurarse una participación clave en Scale AI, que ocupa una posición estratégica en el ecosistema de la IA al controlar el acceso a datos de entrenamiento de alta calidad, Meta se posiciona para acortar distancias con los líderes del sector en su búsqueda de la inteligencia artificial general.