El panorama de inversión en inteligencia artificial está experimentando una transformación significativa en 2025, a medida que la tecnología pasa de ser experimental a esencial en diversas industrias.
Nvidia y Palantir, dos de los protagonistas destacados de 2024 con ganancias aproximadas de 171% y 340% respectivamente, enfrentan trayectorias distintas este año. Las acciones de Nvidia han retrocedido casi un 14% desde enero, mientras que Palantir ha mostrado volatilidad tras un inicio sólido. A pesar de esto, ambas compañías mantienen posiciones sólidas en el ecosistema de IA: Nvidia domina la infraestructura de hardware gracias a su tecnología de GPU y Palantir se consolida como líder en software de análisis potenciado por IA.
Las estrategias de inversión están evolucionando respecto al financiamiento agresivo y la rápida expansión que se observó en 2024. Según FTI Consulting: "Hasta el año pasado, era común encontrar valuaciones en algunos sectores de IA de hasta 50 veces los ingresos, debido a que el entusiasmo de los inversionistas superaba el desempeño financiero. Esperamos que los múltiplos promedio de valuación se reduzcan en 2025".
El enfoque está pasando del hardware y los modelos fundacionales hacia aplicaciones orientadas al cliente. Analistas de Wedbush predicen que "en 2025, el foco del auge de la IA cambiará de los titanes del hardware como Nvidia a los disruptores del software", con empresas como Palantir, Salesforce y otras beneficiándose a medida que "los casos de uso explotan" en entornos empresariales.
La infraestructura de centros de datos se ha convertido en un campo de batalla clave, requiriendo inversiones sin precedentes para satisfacer la demanda de cómputo de IA. Según McKinsey: "Escalar la infraestructura de centros de datos a un ritmo nunca visto requiere mucho capital y estimamos que demandará más de un billón de dólares en inversión en todo el ecosistema". Esto ha generado graves restricciones de capacidad, con tasas de vacancia en los mercados principales cayendo a mínimos históricos del 1.9%.
La disponibilidad de energía se ha convertido en la principal limitante para el crecimiento de la infraestructura de IA. Se proyecta que el sector de servicios públicos verá que la demanda eléctrica de los centros de datos más que se duplique para 2026 en comparación con los niveles de 2022. Esto ha impulsado el interés en fuentes de energía alternativas, y JLL informa que "2025 verá una aceleración en los anuncios de SMR [reactores modulares pequeños], con la cantidad total de gigavatios probablemente duplicándose. La energía nuclear está surgiendo como la solución preferida para satisfacer la creciente demanda energética".
Para los inversionistas, el mercado de IA presenta tanto oportunidades como desafíos. Si bien Nvidia mantiene su posición como la inversión en IA "menos riesgosa" debido a su dominio de mercado y rentabilidad constante, empresas más pequeñas como CuriosityStream han visto duplicar el valor de sus acciones solo en el último mes, ya que los inversionistas buscan exposición a nuevos actores emergentes en IA.
Con el lanzamiento por parte de la administración del presidente Trump de un importante programa de inversión en infraestructura de IA por $500 mil millones, el escenario está preparado para un crecimiento continuo, aunque con un enfoque cada vez mayor en aplicaciones prácticas y retorno de inversión, en lugar de valuaciones especulativas.