TomTom, que alguna vez fue sinónimo de dispositivos GPS independientes, atraviesa una transición desafiante al recortar 300 empleos mientras acelera su estrategia de inteligencia artificial para mantenerse competitiva en la industria de mapas digitales.
La compañía, con sede en Ámsterdam y que actualmente emplea a unas 3,700 personas en todo el mundo, anunció los despidos este lunes como parte de lo que describe como una "reorganización de su estructura... al adoptar la inteligencia artificial". Menos de la mitad de los puestos afectados estarán en los Países Bajos, y los recortes impactarán principalmente a empleados de desarrollo de aplicaciones, ventas y atención al cliente.
TomTom espera que la IA transforme fundamentalmente sus operaciones, permitiendo una mayor eficiencia en la creación y entrega de productos. "Este cambio mejora la experiencia y acorta los tiempos de innovación para nuestros clientes", declaró el CEO Harold Goddijn en un comunicado de prensa. La empresa ha enfrentado dificultades financieras, reportando una pérdida de más de 14 millones de euros en 2024, y prevé una caída en ventas de 574 millones de euros en 2024 a entre 505 y 565 millones de euros en 2025.
El cambio estratégico se centra en la plataforma Orbis Maps de TomTom, que aprovecha la IA para ofrecer soluciones de mapeo más precisas y actualizadas. Esta plataforma combina datos de diversas fuentes, incluyendo la Overture Maps Foundation y OpenStreetMap, con capas de datos propias de TomTom, todas validadas a través de su plataforma nativa de IA. La compañía considera esto esencial para desarrollar tecnologías de conducción autónoma y mantener su relevancia en el sector de la navegación.
La división de consumo de TomTom ha ido disminuyendo durante años, ya que los dispositivos de navegación independientes han sido en gran medida reemplazados por aplicaciones móviles. Actualmente, la empresa genera la mayor parte de sus ingresos vendiendo tecnología de mapas a fabricantes de automóviles y teléfonos inteligentes, incluyendo alianzas con grandes compañías como Apple, Huawei, Volkswagen y Renault.
A pesar de los desafíos a corto plazo, incluyendo las tensiones comerciales derivadas de los aranceles estadounidenses que, según Goddijn dijo a los inversionistas en abril, han hecho que el panorama sea "menos predecible", el CEO mantiene la confianza en la trayectoria a largo plazo de TomTom. El enfoque basado en IA de la empresa representa una transformación significativa a nivel industrial que prioriza la eficiencia tecnológica sobre los modelos de negocio tradicionales, reflejando cambios similares en gigantes tecnológicos como Microsoft, Google e IBM.