Los estadounidenses siguen profundamente divididos sobre el papel de la inteligencia artificial en la sociedad, según una exhaustiva encuesta de Gallup publicada hoy. El sondeo, realizado del 2 al 15 de junio con 2,017 adultos en Estados Unidos, revela una nación partida exactamente a la mitad respecto a la naturaleza fundamental de la IA y su posible impacto.
La encuesta encontró que el 49% de los estadounidenses considera que la IA es "solo el último de una larga serie de avances tecnológicos que los humanos aprenderán a usar para mejorar sus vidas y la sociedad". Un porcentaje idéntico cree que la IA es "muy diferente a los avances tecnológicos anteriores y amenaza con dañar a los humanos y la sociedad".
Lo que hace que esta división sea particularmente llamativa es cómo trasciende las fronteras demográficas tradicionales. Las opiniones sobre el impacto de la IA no varían mucho según el género, la edad u otros rasgos personales. Esto sugiere que la incertidumbre sobre la IA atraviesa las divisiones sociales convencionales, reflejando una ambivalencia social más amplia ante el avance acelerado de la tecnología.
A pesar de la división sobre la naturaleza de la IA, los estadounidenses muestran mayor consenso sobre su posible impacto en el trabajo humano. Una clara mayoría (59%) cree que la IA reducirá la necesidad de que los humanos realicen tareas importantes o creativas, mientras que solo el 38% piensa que la IA se encargará principalmente de tareas mundanas, liberando a las personas para trabajos de mayor impacto. Esta preocupación podría explicar por qué el 64% de los estadounidenses dice que planea "evitar usar la IA en su propia vida el mayor tiempo posible", mientras que solo el 35% la adopta.
La experiencia con tecnologías de IA parece influir significativamente en las percepciones. Los hallazgos de Gallup sugieren que la forma en que las personas ven la IA podría depender menos de quiénes son y más de si la han usado. Quienes interactúan regularmente con la IA son más propensos a creer que es un paso normal en la evolución tecnológica. El setenta y uno por ciento de quienes usan IA generativa a diario la ve como otro avance que los humanos aprenderán a utilizar. En contraste, solo el 35% de quienes nunca usan IA generativa está de acuerdo con esa idea.
A medida que la IA continúa integrándose en la vida diaria, esta marcada división en la opinión pública estadounidense presenta desafíos para los legisladores, las empresas y los educadores. Los resultados de la encuesta sugieren que una mayor familiaridad con las tecnologías de IA podría reducir la aprensión, pero las preocupaciones significativas sobre el impacto de la IA en la creatividad y el empleo humano siguen siendo generalizadas en la sociedad estadounidense.